La perspectiva de género en arquitectura y urbanismo

Con la evolución del ser humano ha ocurrido consecuentemente el cambio en las estructuras sociales, haciendo que se incluyan nuevos aspectos y otros se desechen.

Un ejemplo de ello es la perspectiva de género en arquitectura y urbanismo, ámbito estructural y de edificación en el que también existe formas de discriminación.

¿En qué consiste la perspectiva de género en arquitectura y urbanismo?

Para comprender las bases de la perspectiva de género en arquitectura y urbanismo es fundamental tener claro de qué se trata. Este término y su aplicación pretenden la creación y edificación de espacios que no sean discriminatorios ni excluyentes. De modo que puedan satisfacer las necesidades de cualquier persona independientemente de su identidad de género.

Ante esta realidad, la arquitectura y el urbanismo han incluido la perspectiva de género en su desempeño, brindando espacios que puedan adaptarse a las necesidades de mayorías y minorías por igual.

La idea de forma más clara y sencilla se basa en repensar las ciudades, reinventándolas para que se orienten a la sostenibilidad de la vida, en lugar de otros aspectos de menor importancia.

La arquitectura y el urbanismo no deberían basarse en el arte y la expresión individual sino en la funcionalidad y la inclusión. De esta manera se edifican estructuras útiles y que respondan a necesidades, no a la belleza netamente.

Un ejemplo que puede aclarar mucho más esta concepción es el siguiente: en una ciudad hipotética existen 1000 habitantes, de los cuales 850 poseen bicicletas como medio de transporte y el resto tienen automóviles, construir entonces 100 carreteras y solo 2 carriles bici ¿tendría sentido?

Claramente esto no respondería a las necesidades y además resultaría excluyente pues tampoco se consideran las aceras y pasos peatonales, en caso de que alguien desee simplemente caminar.

En tal sentido, la perspectiva de género en arquitectura y urbanismo debe cumplir con varios aspectos fundamentales:

  • Considerar a todas las personas en la concepción urbanística, de forma que al planificar la creación de espacios se tomen en cuenta las necesidades de todos los individuos.
  • Construir pensando en seguridad, accesibilidad y funcionalidad en lugar de priorizar la belleza, de manera que los espacios satisfagan necesidades colectivas incluyentes y no gustos particulares excluyentes.
  • Fomentar la interacción y el respeto social para que se creen espacios donde las personas puedan socializar y esparcirse colectivamente.
  • Repensar aquello que puede ser excluyente, modificando espacios y estructuras preexistentes que ameriten cambios para ser incluyentes.

Cambios en la arquitectura y el urbanismo desde sus raíces

Para poder llevar a la práctica lo antes mencionado, se ha procurado el cambio desde la teoría con el objetivo de convertirlo en una realidad.

Anteriormente, la arquitectura y el urbanismo eran consideradas carreras y oficios masculinos, de modo que solo los hombres desempeñaban estas labores. En consecuencia, todo aquello que se construyera estaba orientado al punto de vista masculino, sin considerar nada más.

En la actualidad la realidad es otra y la perspectiva de género ha llegado hasta la propia esencia de la arquitectura y el urbanismo. Ahora estas carreras son accesibles para cualquier género.

Comparte este contenido

5 comentarios en «La perspectiva de género en arquitectura y urbanismo»

  1. Igualdad ante todo, está demostrado que una mujer puede realizar labores que estaban destinadas socialmente al sexo masculino, llegando a ser más eficientes que los mismos, y de hecho, desempeñan tales oficios con mayor efectividad y sobre todo con responsabilidad

    Responder
  2. En realidad, creo en la perspectiva de género y creo que todos la debemos tener muy presente siempre, Por respeto y umildad hasia nuestros semejantes.

    Responder

Deja un comentario